Este domingo ha vuelto a disputarse una carrera en el óvalo de New Hampshire tras una larga ausencia de este trazado en el calendario de IndyCar. En una carrera que ha tenido de todo, incluso apareció la lluvia, el estadounidense Ryan Hunter-Reay ha logrado una victoria muy perseguida por Andretti Autosport.
En el inicio de la carrera, programada a 225 vueltas, Conway colisionó con Graham Rahal tras un trompo del primero, provocando así la 1ª bandera amarilla de la tarde. Dario Franchitti partió desde la pole position, y el escocés estuvo liderando la carrera hasta que apareció la lluvia por 1ª ocasión, y tras unas vueltas con el Pace Car, se reinició la carrera cuando la lluvia se detuvo.
El accidente de la jornada, el más espectacular, fue el que protagonizaron Tony Kanaan y Tomas Scheckter al tocarse con Marcos Andretti. El brasileño de KV Racing volcó al impactar contra el sudafricano que está remplazando a Wilson y al chocar contra las protecciones de neumáticos. Las imágenes son espectaculares, pero gracias a dios el de Lotus salió ileso.
Se reinició la carrera y el líder del campeonato, Dario Franchitti, se tocó con el japonés Sato y terminó chocando y abandonando la carrera. Este accidente que dejaba fuera de carrera al escocés volador dejó la carrera muy fácil para Hunter-Reay que veía como su camino hacia la victoria se aplanaba.
El final de carrera se acercaba y apareció la lluvia de nuevo. Fue entonces cuando llegó la polémica decisión de los comisarios: decidieron reiniciar la carrera como si nada sucediera, y es prácticamente imposible conducir en un óvalo sobre mojado. En este reinicio varios pilotos trompearon y uno de ellos fue Will Power.
“Por lo que sucedió en pista no hay excusas. Pido perdón a los patrocinadores, a los fans y a los responsables de la IZOD IndyCar Series”.
Al ver lo desacertada que fue la decisión de dar bandera verde con el trazado mojado, los comisarios sacaron la bandera roja hasta que esta cedió, permitiendo reincorporarse al pelotón a los pilotos accidentados.
Finalmente la bandera a cuadros se mostró a un Ryan Hunter-Reay que cruzó línea de meta en 1r lugar, obteniendo de esta forma su 1ª victoria de la temporada. Por detrás no hubo mayores cambios en referencia a las posiciones de resalida.
El español de Newman-Haas Racing, Oriol Servià, firmó una excelente actuación cruzando línea de meta con el mismo lugar con el que partío en la salida, 2º. Oriol no pudo con un motivadísimo Hunter-Reay, pero su carrera fue para enmarcar y pudo mantener por detrás a Scott Dixon, que finalizó 3º, y a su compañero Hinchcliffe, 4º. Will Power pudo rehacerse con un 5º lugar, pero sin el accidente sufrido por la lluvia podría haber terminado más arriba.
Los latinoamericanos de la categoría no pudieron ni entrar en top 10. El que más cerca se quedó fueErnesto José Viso que vio la bandera cuadros en 12º lugar. Por detrás un discreto Sebastian Saavedra no pudo terminar más arriba del 15º tras su accidente de la semana pasada rondándole en la memoria.
La clasificación general sigue encabezada por Dario Franchitti que ve como Power rocorta la distancia a los 47 puntos. 3º se mantiene Scott Dixon a 73 puntos de su compañero de equipo. Oriol Servià asciende una posición tras su buena carrera en New Hampshire, y ya es 4º, pero muy lejos de Dixon.
Ahora la IndyCar hace un parón no muy largo para volver en 15 días en el conocido circuito de Sonoma, el Infineon Raceway, en California.
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